Pues a falta del reconocimiento medico y la firma de los contratos, parece que ya puede anunciarse que Miguel Ángel Moyá se marchará al Valencia por unos 5 millones de euros. Una perdida importante para el Mallorca, pero necesaria por la nefasta gestión heredada de Vicente Grande y que tiene al club en una situación económica lamentable, bloqueado sin poder fichar, sin un duro y con varias deudas y denuncias que deben satisfacerse en breve.
Por lo tanto, el traspaso del portero de Binissalem se antojaba necesario, ya que es uno de los jugadores con más caché en el mercado (quizá el único junto a Arango). Ya el año pasado se le negó la marcha al mismo Valencia y el jugador tiene ganas de probar suerte en un conjunto más grande, lo que le va a permitir jugar competiciones europeas, y, quien sabe, si acercarse a las convocatorias de la Selección Española. Además, el Mallorca no debe buscar recambio, ya que la titularidad corresponderá a Dudu Aouate, fichado en el mercado de invierno y que ha cuajado un gran rendimiento desde su llegada.
Es una pena, porque Moyá, con 25 años, todavía puede crecer como portero, y el año pasado se rechazaron 8 millones, cuando este año el traspaso se ha cerrado por 5. Pero, a este Mallorca no le va a quedar otra. De estos 5 millones, hay que destinar inmediatamente 3 para pagar las deudas con el Athletic de Bilbao por el traspaso de Aduriz y esperar a ver quien es el siguiente acreedor, ya que de compradores para el club, ni rastro. El siguiente en marcharse será Arango, una baja mucho más importante, y de la que no va a ser sencillo encontrar un sustituto que esté a la altura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario